gyutaro shabana

Como demonio, Gyutaro fue un joven relativamente alto de complexión algo musculosa[4] con una tez gris pálida[5] con puntos negros cuya anatomía era algo extraña en el sentido de que la parte superior del torso, los brazos y las piernas eran extremadamente musculosos donde su cintura era increíblemente delgada, su pelvis sobresalía en un ángulo antinatural[6]. Poseía ojos delgados, verdes y rojos, su esclerótica naranja brillante[7], que estaban inclinados drásticamente hacia abajo a los lados y en las irises una numeración indicativa de su posición como la Luna Creciente Seis dentro de las Doce Lunas Demoníacas (陸 上弦 (Roku Jōgen,?). Tenía el cabello rebelde recogido en una coleta[8], la parte superior era de color negro mientras que en la inferior de un verde más brillante desgastado[9] con un estilo desordenado con flequillos desiguales y varios ahogues. Su cuerpo y rostro tenían marcas notables como una tinta en forma de manchas negras en su cuerpo y un patrón similar al agua que fluye en su rostro[10]. Muchos han considerado a Gyutaro alguien muy feo[11]. No vestía camisa, solo lucía un par de pantalones azules holgados y siete piezas de tela roja estampada para decorar su cuerpo, una grande alrededor de su cuello y tres más pequeñas alrededor de cada brazo[12]. Al ser parte de las Doce Lunas Demoníacas, Gyutaro poseía una fuerza y resistencia sobrehumana y completamente diferente a la de un demonio convencional debido a que por sus venas, corría una porción considerable de la sangre de Muzan Kibutsuji y también a que durante años consumió una gran cantidad de personas. Gyutaro asegura haber matado y devorado él mismo a quince Pilares[18]. Aún cuando la lucha contra los cazadores se decantaba a favor de ellos, Gyutaro y Daki pudieron recuperarse e inclinar la balanza a su favor durante la lucha. Fue capaz de herir, mutilar y casi asesinar a Tengen Uzui, el Pilar del Sonido, a Tanjiro y a Inosuke quienes sobrevivieron gracias a la Técnica de Sangre Demoníaca de Nezuko que pudo neutralizar el veneno presente en su sangre. Su fuerza era tan abrumadora incluso en sus días como humano al ser capaz de asesinar sin dificultades a un Samurai y a una mujer adulta más grandes y más pesados que él. De hecho, Muzan declara más adelante que sí él no hubiera sido tan arrogante, probablemente hubiera podido ser capaz de matarlos a todos[19]. Regeneración: Al ser una de las Doce Lunas Demoníacas y la sexta Luna Superior, su capacidad de regeneración superaba con creces a la de los Demonios comunes. Gyutaro fue capaz incluso de agarrar una Espada Nichirin con los dientes sin que represente un daño considerable para él. Velocidad: La velocidad de Gyutaro Gyutaro a punto de atacar a Tanjiro demostrando su gran velocidad. En términos de velocidad, Gyutaro demostró ser bastante rápido, mucho más que su compañero Gyokko, la Quinta Luna Superior que en términos de poder es superior a él. Esto es en parte a la cantidad de sangre que recibió de parte de Muzan Kibutsuji y a la cantidad de personas que devoró a lo largo de los años. Su velocidad es tal que podía aparentar teletransportarse apareciendo de súbito frente a su oponente sin darle tiempo a reaccionar[20]. Gyutaro era capaz incluso de ponerse al mismo nivel de la velocidad vertiginosa que posee Tengen Uzui, el pilar del sonido y uno de los espadachines más veloces siendo capaz de adelantarse a sus movimientos y lanzar ataques mucho más veloces que los de Uzui[21][22]. Al mismo tiempo, Gyutaro era lo suficientemente rápido como para repeler una ráfaga de Kunais lanzados contra él[23]. Experto combatiente: Como parte de sus recuerdos humanos, Gyutaro se había curtido en un excelente luchador, siendo tan hábil como para igualar en fuerza y técnicas de lucha a un pilar del calibre de Tengen Uzui a pesar de su experiencia como Shinobi. Veneno: Demostró tener la capacidad de tener veneno en sus guadañas, siendo mortal si no se trataba con rapidez. Este veneno casi acaba con la vida del pilar del sonido, Tengen Uzui quien sólo pudo sobrevivir gracias a la técnica de sangre demoníaca de