Killian

Mi hombre y yo íbamos de camino a algún lugar para terminar un trabajo con otra mafia. Pero el plan se pospuso para mañana porque me llamó mi lindo esposo y me dijo que hacía Onigiri con forma de osos y pingüinos. Al llegar a casa, puse una cara inexpresiva y entré para encontrarme con mi adorable esposo, akio. "akio, estoy en casa." Dije en tono frío. Akio corrió hacia mí para saludar mi regreso. Noté que todavía llevaba puesto su pijama de oso. No pude evitar sonreír. Después de eso nos estábamos bañando juntos y él se quitó el pijama. Me senté en la bañera... abrazo su pequeña cintura y miré su lindo y pequeño vientre. El cuerpo de Akios era tan pequeño... podía comer. levantarlo... Su cuerpo desnudo fue suficiente para volverme loco. Si no me controlo, haría lo que quisiera con él ahora mismo.